sábado, 28 de noviembre de 2009

VIAJAR PARA VIVIR parte 3

Auckland-Whangarei-Paihia-Russell

Después de haber visitado en Auckland el zoológico, haber caminado por todo el centro de tienda en tienda viendo souvenirs y conocido la Sky Tower, visto el Auckland Domain and Museum con sus jardines invernales, cenado en un restaurante japonés exquisito y haberle puesto un golpazo al coche saliendo de un estacionamiento público, seguimos subiendo por la costa del Pacífico hasta las cascadas de Whangarei (estas son especiales para nosotros ya que son las primeras que conocimos en el viaje) a las que llegamos despues de haber recorrido el track rio arriba...
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Después seguimos hasta Paihia, mar de todos los azules que se junta con un cielo manchado de nubes que apenas entre deja ver decenas de islas flotando en el horizonte. Ahí acampamos en las Cascadas Haruru, uno de mis lugares favoritos para dormir y amanecer por supuesto...




Al otro día fuimos a Russel, que se enorgullece de ser el primer asentamiento europeo de Nueva Zelanda y su primer capital por ahí de 1840. Ahí visitamos la iglesia cristiana más antigua en Nueva Zelanda para después seguir subiendo




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miércoles, 18 de noviembre de 2009

VIAJAR PARA VIVIR parte 2

AUCKLAND

Seguimos al norte hasta llegar a la cuidad más grande del país con un tercio de la población total de Nueva Zelanda. Ciudad cosmopolita repleta de museos y galerías, excelentes restaurantes y bares, ideal para vivir, trabajar y divertirse. La cuidad, rodeada de parques, combina un estilo de vida sofisticado con la cercanía a playas ideales para nadar, pescar o practicar el surf.

Piha Beach, hermosa!

Zoo!!! (esta foto es pésima, por eso me gusta!!! jajajajaja)

Entrada principal del museo de Auckland


Tulipanes en los jardines de Invierno

Cena en restaurante japonés!!!


Casa Maori, tallada en madera y sin zapatos en simbolo de respeto

SKY TOWER

VIAJAR PARA VIVIR

Pilar vino de vacaciones y guardé todo el dinero que pude para ir a "Dar la vuelta por Nueva Zelanda" en mi Nissan... No sabíamos cuanto iba a durar (el dinero) y solo sabíamos por dónde empezar, eso era todo, lo demás lo descubriríamos en el camino...

La primera parada fue un viejo conocido mío, la "Península de Coromandel" donde visitamos Cathedral Cove playa espléndida enmarcada por una bóveda de roca como única entrada llena de conchas de mar hechas pedazos que pintan la arena de rosa.

Disfrutenla!

martes, 3 de noviembre de 2009

EL AMOR DE MI VIDA

Irte con la promesa de volver. De verse pronto. De fidelidad. De amor incondicional, de esperar al otro con esas ansias que destruyen el alma. De llamar y escribir. De amar dormido o despierto.

Cuando imaginas ya el regreso y el reencuentro, la ropa que llevarás puesta y como se verá ella incluso antes de haberla dejado. Cuando cada día de espera duele como el viento congelado que corta las manos. Cuando llorar en la oscuridad de la noche con el pecho agotado de extrañar se vuelve parte de los días cotidianos. Cuando crees que no puedes más y no tienes otra opción que apretar los dientes y puños cada que una pareja extraña te recuerda el dolor intenso de la soledad, esa soledad que solo el amor es capaz de producir en el corazón y que lo marchita de a poco. Tuve todos los sentimientos más profundos y dolorosos que jamás hubiera tenido antes pero sin una sola gota de miedo, nunca tuve miedo, solo ese pensamiento permanente casi siempre dulce y a veces amargo que no deja olvidar a la persona amada.

No queríamos despedirnos. Sabíamos que eso sería lo más doloroso, pero aun así lo hicimos y no reparamos en bajar hasta el fondo abriendo cada puerta de nuestro interior y experimentar con cierto placer ese dolor penetrante y agotador de la despedida del ser amado, sin saber si la próxima vez que nos veríamos ese fuego ardiente seguiría allí para cumplir todas las cosas que en ese momento deseábamos tan intensamente. Fue justo un día antes de partir. Lo hicimos hasta no poder más en un mar de lágrimas y promesas.

Pasaron 5 meses que me parecieron 50 años de esperarla hasta que ella vino a mí. Y entonces volví a vivir. Las fuerzas regresaron y sonreí con más fuerza que nunca. Tenía los días de mi vida por delante…
Pili te amo, eres el amor de mi vida!